Como parte de la reforma democrática del Estado, la Constitución del 2008 incorporó un conjunto de competencias exclusivas a ser ejercidas por cada nivel de gobierno. Una de estas es la de áridos y pétreos, la cual corresponde a los 221 cantones del país. Los gobiernos municipales tienen la capacidad para decidir sobre la explotación de este tipo de materiales existentes en los lechos de los ríos, las quebradas y las canteras, además, capacidad para definir sobre el uso y ocupación del suelo de su territorio y beneficiarse de los ingresos que esta explotación genere.
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