ARCHIDONA, Napo.- En la vía que une a las poblaciones de Tena y Baeza existe un punto donde todas las mañana se percibe el olor a leña y tortillas de maíz o harinas cocidas en tiesto (vasija o plato de barro). Justamente en el km 22, es el paradero, en una cabañita construida con materiales de la zona y atractiva para los turistas que se estacionan en el lugar.
Es un sitio acondicionado como cafetería a lo natural, su paisaje lo componen árboles, incluso fauna, pues hay días en los que lo visita un perezoso.
Desde hace varios años Nancy Romero, de 50 años, oriunda de Morona Santiago, es la encargada de amasar las tortillas, junto a su esposo, Oswaldo Brito (57), nacido también en esa provincia. Ambos, desde hace 10 años implementaron un lugar parecido en Baeza, donde empezaron su negocio de comida alternativa típica, en la vía al Arriero.
Nancy amasa todos los componentes: huevo, leche, agua, mantequilla y la harina de maíz; luego la cocción de las tortillas, en un tiesto a fuego de leña, en un horno en las mismas condiciones. Cada tortilla tiene un costo de USD 0.75 acompañado de café pasado, morocho o chocolate.
La atención empieza desde las 06h30 hasta las 22h00, mientras que en el local de Baeza la atención es ininterrumpida. Es una empresa familiar en la que laboran padres, hijos y nueras nos comenta Nancy Romero.
El acogedor lugar tiene una extensión de una hectárea y desde ahí se puede observar todo el paisaje amazónico. Julio César Lanchimba, turista quiteño, quien hizo una parada en este lugar, dijo que las tortillas que ahí se preparan son una delicia y para calmar el frio de la mañana y más si las acompaña un delicioso café.
Similar experiencia compartió Henry Ortiz, guayaquileño, quien estaba de visita en Archidona y alguien le había sugerido probar las tortillas.
Asimismo cuando un comensal llega al sitio, es atendido cordialmente y las tortillas son cocidas en ese momento, bajo el calor del fuego en leña, por un espacio de 4 minutos; tiempo suficiente para que estén listas y sean llevadas al plato para el deleite de las personas.
En el día Nancy y su esposo Oswaldo preparan entre 40 a 100 tortillas, aparte venden chocolate, café artesanal con huevos criollos que son adquiridos a los productores locales de Napo.
DATO: Este emprendimiento nació como una necesidad de tener un lugar para compartir con la naturaleza, entre las personas de los alrededores, para reunirse y tomar un té o café. Además, pese a que el local no tiene nombre, sus clientes lo han bautizado como “Las Tortillas de Baeza”.