PORTOVELO, El Oro.- El cantón Portovelo, considerado el “primer centro minero del país”, a pesar de ser pequeño en extensión, posee una gran variedad de sitios turísticos, considerados únicos en el Ecuador. Entre ellos destacan las Aguas Termales, ubicadas a 3 kilómetros de distancia del centro de la ciudad.
El atractivo está constituido por un pequeño reservorio de aguas de origen volcánico que contiene minerales disueltos y se ubica a un costado de la playa del río Amarillo, que se forma en el sitio Virgen del Cisne.
Este lugar fue olvidado por años y hoy en día, propios y turistas, no dejan de visitarlo, gracias a que fue regenerado en su totalidad por el Municipio liderado por Paulina López Sigüenza.
Actualmente, en las instalaciones hay una fosa y una glorieta, se mejoraron los accesos, hay baños, luz y otros servicios básicos que la ciudadanía requería.
La temperatura del agua oscila entre 38 y 45 grados centígrados y se encuentra al alcance de los visitantes, gracias a que está “al aire libre”.
Este sería el único lugar que posee aguas termales, en la parte alta de El Oro.
Bondades curativas
Los portovelences y quienes conocen este paradisiaco lugar, aseguran que el agua que fluye del centro del tierra tiene bondades curativas, mejorando la salud de quienes se bañan en ellas.
Según los lugareños el agua permite curar varias enfermedades entre ellas las relacionadas a los huesos, piel, afecciones propias del estrés, respiración, como exfoliante de piel, entre otras.
Normas de uso
Las personas que quieran usar la piscina de aguas termales deberán usar traje de baño; no pueden utilizar dentro de la misma jabón o champú, ni contaminar con algún otro producto el agua; está prohibido botar basura y se debe respetar la tranquilidad de los demás visitantes.
A este lugar se puede acceder desde Portovelo, por la vía que conduce al sector Lourdes o por la vía de segundo orden desde el barrio El Paraíso; esta última permitirá al turista disfrutar de otros dos atractivos; “La chorrera”, que es una parte de la red de captadores de la empresa SADCO, construido a principios del siglo XX; y la Hidroeléctrica Río Amarillo, motor del desarrollo minero local.