CHONE, Manabí.- A un año y tres meses de la peor desgracia que haya sufrido la provincia de Manabí, en la actualidad por el terremoto de abril de 2016; Chone no ha perdido su prosperidad, identidad y dinamismo; sigue en la ruta del desarrollo productivo, comercial y turístico, que hoy lo presenta a la colectividad para que lo conozcan a nivel nacional e internacional.
Chone, es el cantón más grande de Manabí y está ubicado en la parte norte de la provincia, es uno de los lugares que se ha consagrado como cúspide del folklore costeño en el Ecuador, principalmente de la cultura Montubia y considerado como uno de los sitios con el mejor cacao fino de aroma.
Sus autoridades se han empeñado en dar a conocer todo el potencial turístico que posee su contorno, por eso su alcalde Deyton Alcìvar, afirmó que se busca promocionar los lugares turísticos que tiene el cantón, ya que Chone cuenta con balnearios de agua dulce, cascadas, humedales, piscinas, festivales culturales, deportivos, entre otras alternativas que pueden ser disfrutada por las familias ecuatorianas, como de quienes nos visiten que pueden degustar también de la variada gastronomía.
Para aquellos que buscan naturaleza y balnearios de agua dulce el cantón, les ofrece lugares en cantadores como el Centro recreacional Café Color Tierra, ubicado en la vía Chone-Quito hasta llegar al sitio San Andrés, cuenta con piscina natural, juegos para niños y niñas, caminatas, escalamiento, campamento, picnic y servicio de restaurante. Otro lugar para disfrutar en familia son las Cabañas del Toto que se encuentran en la comunidad Boca de Chorrera a 2 km de la parroquia Canuto, en este lugar se realiza cada año la natilla más grande del mundo.
En la parroquia Canuto se encuentra una de las reliquias mejor guardadas de esa región, la iglesia patrimonial con un mausoleo familiar de principios del siglo 20.
El monumento a los Raidistas, es el símbolo de la identidad chonera. Construido para rendir homenaje a 5 ilustres representantes de este cantón Carlos Alberto Aray, Juan de Dios Zambrano, Emilio Hidalgo, Plutarco Moreira, Artemio Aray, quienes en el año de 1939 empezaron un sueño que para muchos era imposible, la unión de la Costa con la Sierra en un chevrolet de 1931.