El desarrollo de Tulcán, cantón fronterizo de 97.664 habitantes, conformado por 2 parroquias urbanas y 9 rurales, se debe a la acertada gestión de la máxima autoridad cantonal que ejecuta mega obras de vialidad, saneamiento y dotación de servicios básicos, entre otras, bajo administración directa y mediante convenios interinstitucionales, como la inaugurada en la loma de Taques.
Uno de los barrios más conocidos de Tulcán, donde hace 80 años se asentó las primeras viviendas y sus habitantes consumían agua de vertientes naturales. Ahora, con la inauguración del moderno sistema de bombeo para la distribución de agua potable y la ampliación de la red de alcantarillado, Julio Robles, alcalde de Tulcán, cambió esta realidad.
Con una inversión de USD 297 418, recursos 100% municipales y una vida útil superior a los 30 años, esta obra beneficia a más de 250 familias. Para Moisés Almeida, presidente del barrio, esta obra no solo es de carácter material, sino que tiene esencia social y humanitaria.
Mientras que para el barrio San Fernando, el municipio junto a la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado-Tulcán (Epmapa-T) destinó USD 6 500 para mejorar la red del elemento vital y del desagüe de líquidos residuales, que incluye 4 pozos de revisión útiles para asegurar el mantenimiento del conducto. Cerca de 50 personas se benefician con esta obra que proyecta el desarrollo del sector.
Trabajos similares se realizaron en el pasaje Juan de Velasco (sur), donde se instaló tubería PVC para agua potable y conductos de cemento para alcantarillado, con una vida útil de 50 y 20 años respectivamente. Se destinó USD 6 000 para que esta obra culmine y beneficie a cerca de 100 tulcaneños que hoy gozan de estos servicios.
