El proyecto Metro de Quito adquiere forma: este lunes se presentó la caracterización geométrica, trazado e implantaciones de la Primera Línea del Metro de Quito, que pasará sobre o bajo 14 quebradas de la ciudad sin afectar su cauce y además, consolidará los terrenos de rellenos mediante la utilización de sistemas de mejoramiento y compactación.
Esta caracterización y trazado de la primera línea que el director-consultor José Antonio Gallego, entregó al alcalde Augusto Barrera, es el resultado de los estudios geológicos, hidrogeológicos, topográficos, medioambientales y físicos realizados el último año en la ciudad de Quito.
Este proceso, ofrecerá mayor seguridad y mínima afectación al entorno de la obra de la Primera Línea del Metro de Quito que unirá Quitumbe y El Labrador en un tiempo de 32 minutos y dará accesibilidad de servicio a casi el 100% de la población usuaria de transporte colectivo a través de 15 estaciones definidas de acuerdo a criterios de demanda, conectividad y accesibilidad establecidas por el estudio de movilidad realizado por Metro de Madrid.
El estudio asegura que en la franja delimitada por las avenidas Mariscal Sucre, Napo y Seis de Diciembre, la línea 1 del Metro de Quito atenderá al 93% de la población usuaria.
La línea 1 arrancará con 18 trenes de seis vagones cada uno, que con una frecuencia de circulación de 4 minutos entre cada uno, generará una capacidad de transporte de hasta 19 mil viajeros por hora, es decir aproximadamente unos 400 000 pasajeros diarios que, al reducir la frecuencia a dos minutos, podría duplicar su capacidad de transportación hasta los 800 000 pasajeros diarios.
Las 15 estaciones ubicadas en Quitumbe, Morán Valverde, Solanda, El Calzado, El Recreo, La Magdalena, San Francisco, Alameda, El Ejido, Universidad Central, La Pradera, Carolina, Iñaquito, Jipijapa y El Labrador tienen la característica de ser elementos integrados en un solo volumen, con proximidad a la superficie, rápidos y cómodos accesos hasta los andenes a través de 79 escaleras mecánicas, 47 ascensores, amplios espacios en su interior y accesibilidad total para personas de movilidad reducida.
El trazado del túnel de 22 kilómetros contempla innovadores sistemas de seguridad con pozos de ventilación, salidas de emergencia, pozos de compensación, sistemas de alarma y control, monitoreo permanente y una central de mando que estará ubicada en la estación Quitumbe.
Para la caracterización geométrica de la línea 1, se realizó además un estudio de posibles afectaciones de edificaciones, servicios y movilidad de la ciudad, con la inspección de 3 086 unidades estructurales a lo largo de la franja de influencia del trazado de la línea 1 y un inventario de instalaciones de redes de servicios públicos como agua potable, alcantarillado, colectores, redes eléctricas aéreas y subterráneas, instalaciones de servicios telefónicos y de semaforización, con el objeto de procurar la menor interferencia con estos y otros servicios públicos y privados.
El estudio define que la Línea 1 del metro de Quito, será la columna vertebral del Sistema Integrado de Transporte Masivo y al ser un sistema modular, tiene la posibilidad física de ampliar la línea 1 desde El Recreo con una nueva línea hacia el sur oriente para atender otras zonas del sur de Quito y, dos líneas adicionales desde la estación de El Labrador, una de ellas hacia el noroccidente abarcando la zonas de Cotocollao y, la otra línea hacia el nororiente para atender a los usuarios de Calderón y su zona de influencia. La planificación establece además la posibilidad de construir cinco estaciones adicionales a las 15 propuestas para la línea 1.
FUENTE: www.quito.gob.ec