PUYO, Pastaza.- Con una inversión de $855.845,60, el municipio del cantón Pastaza, encabezado por Roberto de la Torre como alcalde, ejecutó el proyecto de recuperación, mejoramiento y ampliación de la planta potabilizadora de agua potable San Vicente que fue construida hace 15 años. El acto de entrega se realizó el viernes 16 de junio, con la asistencia de autoridades de la ciudad y la comunidad.
La planta San Vicente, tiene una capacidad procesamiento de agua potable de 100 litros por segundo, para servir al menos a 28 mil pobladores de la ciudad. Esta sumada al proyecto “Río Blanco” que será entregado en los próximos meses, garantizan el agua potable por unos 50 años, incluso a una población de hasta 80 mil habitantes a futuro, manifestó el alcalde Roberto de la Torre, durante el acto de entrega de la planta.
En el año 2001, se inició el proyecto San Vicente, con la visión de dotar de agua suficiente a una ciudad que crecía de manera acelerada. Desde la captación, en Pindo Mirador del cantón Mera, hasta la planta en Puyo, fueron 10.5 km de distancia de recorrido para suministrar del líquido vital a la población, se logró el objetivo, construyó la planta y el agua llegó.
Sin embargo, por varios años y malas administraciones, la planta funcionaba a medias. Ante, la necesidad de construir un nuevo sistema de agua potable, porque la actual adolecia de calidad, según unos estudios determinaron que el agua que se consumía en la ciudad, no era apta para el consumo humano.
Con la inversión que realizó la municipalidad de Pastaza ahora la planta luce diferente: acceso adoquinado, cerramiento, cuarto de bodega, baterías sanitarias, cuatro unidades de floculación y sedimentación, encargados de agitar los coágulos de agua, como un paso esencial para su purificación y para retener la arena y las partículas pesadas que traen las aguas exteriores a fin de evitar que ingresen a los canales. Seis filtros descendentes para filtrar el agua tratada de las unidades de floculación y sedimentación, una unidad de cloración o desinfección y un tanque de reserva con una capacidad de mil metros cúbicos; todo este proceso permitirá garantizar la calidad del líquido vital, de tal forma que llegue a los hogares pura y saludable.
San Vicente se presenta como una obra moderna para una ciudad moderna, otra obra de calidad que entrega una administración que trabaja pensando en el futuro.
Fuente: Gobierno Municipal de Pastaza