Ana L. Báez
Madre de tres hijas, con 40 años de casada. Doña Anita – como la llamamos cariñosamente a nuestra compañera – nos cuenta que ha sido bendecida con tres hijas. Todas profesionales. Lorena, su primogénita; le sigue Verónica y Pamela, el conchito, como se dice popularmente.
Mujer de carácter relajado irradia jovialidad y se nota que disfruta lo que hace. Nos cuenta un poco sobre su relación con sus hijas y nos describe con un dulce candor, anécdotas de, cómo distribuyó su tiempo entre: sus labores en la Asociación de Municipalidades Ecuatorianas, donde lleva 40 años de colaboradora, y sus tareas como madre.
Casa, escuelas, oficina… gastronomía, colegios, reuniones… enfermera, fiestas, capacitaciones… profesora, consejera, talleres… ¡ufff!… cuánto trabajo, compañeras y compañeros lectores. El resumen es corto y rápido pero de una dimensión que la pueden imaginar, y trascendental por el amor y la formación que nos dan…
Al repasar todas las acciones que ha llevado a cabo, también recapacita como hija y agradece a Dios por la madre que tiene.
Se despide con la amabilidad que la caracteriza y define, a la tarea que no termina nunca como la gestión más hermosa del mundo.
“Los Municipios Somos La Patria”